Language:

English Back to blog

Entre el pánico del COVID-19, hay un instinto desesperado a proteger nuestros mismos del virus del que sabemos muy poco. Nos armamos por leyendo artículo tras artículo de la llegada y propagación del virus. Nos aprovisionamos con el equipo de protección, y también las necesidades cotidianas porque el COVID-19 ha amenazado la vida como la conocemos. El resultado es que nos metemos in discusiones con seres queridos sobre lo que es el mejor plan de acción para la familia o la relación de pareja. ¿Cuántas protecciones sería bastante? ¿Cuáles acciones en la vida cotidiana podemos tomar que se considere seguro? La discusión aparentemente nunca termina, y todo el mundo se siente tenso y agotado.

En el quid de la cuestión existen preguntas que raramente nos encontramos en la vida moderna. ¿Cuánto nos vale vivir el presente sobre protegerla para mañana? ¿Qué es la capacidad personal para aceptar el riesgo en frente a posible peligro inminente?

Estas preguntas no nos tocamos en la primera cita. Ni la última cita. No son hablado en las cenas familiares. Con frecuencia, creamos que los otros piensan el mismo como nosotros, especialmente si todos estamos de acuerdo en los otros temas importantes de la vida. Este no necesariamente sea el caso. Muchas familias y parejas son descubriendo ahora que sus tolerancias para riesgo de enfrentarse la muerte no son iguales. Cuando enfrentado con una opinión diferente que nuestros, asociamos la diferencia con traición del nivel más alto para potencialmente ponernos en peligro.

Esta razón es exactamente por qué no debemos hacerlo así. Si vamos a sobrevivir el COVID 19 (o posiblemente avanzar también), nos necesitamos el uno al otro. Necesitamos el fuerzo y el apoyo de nuestros amados. No significa que todo el mundo está de acuerdo. Yo sugiero que reconocemos el hecho que, en nuestras vidas, nunca necesitamos comprobar si nuestros amados tenían la creencia similar que nuestra con respeto a cómo hacer durante una pandemia. Entonces, aceptamos que es la culpa de nadie que nuestras opiniones sean diferente. Usamos las técnicas de comunicación para escuchar el uno al otro y demostramos a los otros que sus perspectivas son estimadas y respetadas. Quizás no siempre logramos lo que deseamos, pero la consideración entre la familia o la relación de pareja se puede fomentar. Tomaríamos las acciones tras consulta con los amados en lugar de tomándolos precipitadamente por animosidad.

Nunca piensa el mismo todo el mundo, pero no significa que no podemos apoyar el uno al otro durante el crisis. Nuestra sociedad se ha hizo más diversa, y por lo tanto nuestras opiniones se ha hicieron mas diversa. Necesitamos adoptar el hábito de escuchar para levantarse todos, ahora más que nunca.

Next Post

Contact Us

Reach out to Therapeutic Tseng to schedule a session, ask questions, or just connect. We'll be sure to get back to you as quickly as possible.